El cuarto poder... pero no precisamente para los periodistas

El otro día en una rueda de prensa relacionada con la sanidad y con las reivindicaciones de ciertos sindicatos para aumentar la plantilla del hospital y mejoras laborales, salí con una rara sensación.

Los sindicatos se quejaban de que los trabajadores no pueden elegir los días libres porque no hay suficiente plantilla que cubra las vacantes, que hacen turnos maratonianos, que no se respeta la vida personal, algo que hace imposible la conciliación de la vida laboral y personal... Cuando estaban hablando pensaba que en esas mismas circunstancias estamos los periodistas o por lo menos, en esa tesitura me he encontrado yo en los 10 años que llevo ejerciendo.

Ahora mismo no puedo cogerme días libres porque no hay nadie que pueda hacer mi trabajo, cuando estaba en la prensa escrita hacia jornadas de mas de 12 horas y al día siguiente nada de entrar mas tarde, nos pagan mal, hay un intrusismo increíble y los medios se aprovechan de los becarios para pagarles poco y que trabajen como otro periodista que está en plantilla. Y así un largo etcétera.

La única diferencia que encontré respecto a los trabajadores de la sanidad fue que, por lo menos en mi caso, nunca he tenido un sindicato detrás que dé la cara por mi, que defienda mis intereses y sea capaz de denunciar la situación.

Es curioso como los periodistas denunciamos en nuestras páginas, en nuestras radios o en nuestras televisiones las reivindicaciones de cientos de trabajadores y ¿qué pasa con las nuestras? ¿quién las defiende? Nadie. Muchas empresas organizan a sus trabajadores de tal manera que no puedan asociarse para conseguir representación sindical y así poder campar a sus anchas y hacer de su capa un sayo. Mientras, los periodistas seguiremos con grandes titulares las demandas laborales de miles de personas sin pararnos un momento a mirar hacia dentro y darnos cuenta de que toda esta situación es culpa nuestra. Porque sino somos nosotros mismos quienes escribamos sobre la situación ¿cómo se va a saber?

En fin... el cuarto poder... para otros porque para los del gremio nada de nada.